Queridos amigos:
Con todo afecto y
gratitud os quiero hacer llegar mis mejores deseos para estas fiestas navideñas
y para todo el año 2020. Afecto sincero porque habéis venido acreditando a lo
largo del tiempo vuestra pertenencia a esa gran familia que formamos todos
cuantos nos sentimos comprometidos con los valores del Teléfono de la
Esperanza. Pero también sincera gratitud porque con vuestra colaboración
contribuís a que podamos mantener los programas destinados a ayudar a tantas personas
que buscan en nosotros un apoyo para superar las dificultades por las que, en
un momento dado, pueden sentirse agobiadas. También, por supuesto, a todas
aquellas que desean les acompañemos en sus procesos de maduración y crecimiento
personal.
Me siento, y recojo
también el sentir de todos cuantos integramos esta gran familia del Teléfono de
la Esperanza, muy satisfecho de compartir con todos nuestros socios y
colaboradores los valores de la solidaridad a que nos invita la
Navidad. Y que la paz que, según piadosa tradición, se anunció a
los hombres de buena voluntad esté presente en vuestros hogares. Que no falten
en ellos los ingredientes que hacen posible la vida venturosa que de corazón os
deseo. Para estos días de Navidad y para todo el año 2020 que estamos a punto
de estrenar.
Cordialmente
Miguel Ángel Terrero
Presidente del Teléfono
de la Esperanza.
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